Las teorías clásicas afirmaban que la inteligencia, esta determinada desde antes del nacimiento y que las experiencias educativas que se debían proporcionar al niño dependían de su ritmo de aprendizaje. Esta asunción errónea del carácter innato de la inteligencia daba lugar a una intervención educativa bastante desafortunada. Por el contrario, hoy se interpretan las diferencias en inteligencia en términos de diferencias en la velocidad del pensamiento.
En general, los currículos escolares reflejan esta idea: todos los niños deben recibir el mismo currículum, pero a un ritmo diferente. No podemos esperar que los niños lentos aprendan tan de prisa como los rápidos, deberíamos simplificarlo para los aprendices lentos y hacerlo más complejo para los aprendices rápidos. En la actualidad, estas diferencias no se explican solamente como diferencias cuantitativas, sino también cualitativas; es decir, en cómo aprenden y con qué rapidez lo hacen.
JEAN PIAGET 1896 - 1980
Este propone, que el desarrollo se produce en estadios de desarrollo. Lo que significa que la naturaleza y los componentes de la inteligencia cambian significativamente con el tiempo, que las diferencias no están en el grado, sino en el tiempo.
Los estadios del desarrollo son diferentes y el contenido de cada uno de ellos determina la forma en que se comprende el mundo y se interpreta la información procedente del ambiente.
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